Un complicado cambio de trabajo y de ciudad en la que residía, poco antes de someterme inesperadamente a dos graves intervenciones cerebrales, hicieron que perdiera el rumbo de mi vida. La incertidumbre, la angustia y el miedo al futuro fueron atrapándome.

Toqué fondo

Fue la desesperanza la que me impulso a iniciar una profunda búsqueda interior, hasta que conecté con mi Esencia y descubrí quién soy, dónde reside mi fuerza y mi poder. Fue un proceso difícil, en el que acepté mis preciados dones, vinculados al servicio a los demás, que es mi verdadero propósito y da sentido a mi vida.

Así encontré la fortaleza para afrontar con coraje un radical cambio personal y profesional, recobré la alegría y la pasión por mi nuevo camino. Desde ese momento, he ayudado a cientos de personas a salir del dolor y la desesperación, a sanarse emocionalmente, acompañándolas en sus procesos de trasformación, que han cambiado por completo sus vidas.